Hoy os pongo un trabajo de mi hermana Ángeles que creo se merece estar aquí.
Es una lecherita que venía llena de bombones, y como ella es como yo, no tira nada, la guardó y llegado su momento pasó por el taller de "chapa y pintura" y ha quedado preciosa.
Está pintada a mano con acrílicas, dado barniz y luego envejecida.