Este plato lo hice hace tiempo pero no me había acordado de ponerlo, está craquelado y con servilleta recortada, luego pintado de color beig y con barniz para protegerlo.
Esto lo he visto en algunos blogs y me ha hecho mucha gracia, lo llaman polvo de hilo y se trata de ir recogiendo los hilos que nos sobran de las labores de costura que hacemos, dicen que hay que sacarlo al jardín las noches de luna llena y se supone que vienen los pajaritos a coger los hilos para hacer su nido.
La leyenda me encantó.
He reciclado un bote, le he puesto una etiqueta y he recortado unos dibujos, los he pegado y barnizado.
Pensé que me iba a costar más hacerlo pero la verdad es que es muy fácil, al próximo que haga le voy a cambiar algunas cositas que sobre la marcha he ido viendo.
Estos ratoncitos son para guardar el diente de los niños cuando se les cae y a la mañana siguiente que se encuentren la monedita guardada en el bolsillo.