Me regalaron un pie de lámpara de madera, pintado de un color verde oscuro feísimo, saben que yo lo reciclo todo, "haber que sacas de esto" me dijeron, la verdad es que estaba nueva. Les avisé: "luego no me la pidan que esta es para mi".
Limpié bien y le dí dos manos de pintura a la tiza en ese azul náutico que tanto me gusta, luego le pasé cera que deja un acabado estupendo y lista.
Compré una pantalla normalita en blanco, pero me parecía que quedaba un poco sosa, opte por pintar los bordes de la pantalla con la misma pintura del pie y al final hice un molde de pasta, pinté del mismo color y lo pegué en la pantalla.
Creo que el resultado ha quedado bonito, a mi me encanta en ese rinconcito.
Espero que a vosotras también.